A Bello no le gusta valorizarse

A propósito de la actualización catastral que se realiza en la ciudad por estos días me han surgido un sinnumero de reflexiones que quise compartir con los lectores de mi blog.

Para comenzar es preciso mencionar que en los últimos 7 años las casas en Bello se han valorizado un 100%, lo que quiere decir que si usted vende o alquila su casa le pondrá el precio justo con total tranquilidad por que en la ciudad la gente ya los paga sin problemas. Y en otras palabras un poco más claras: su casa vale el doble de lo que valía hace menos de 10 años.

Si uno tuviera que exponer las razones que llevaron a que hasta nuestras tierras haya llegado semejante incremento en el costo de la tierra, la primera que tendríamos que esbozar sería la política. La voluntad política y el surgimiento de un grupo de dirigentes que visionaron más allá de lo que sus antecesores pudieron o su intereses personales les permitieron, son los grandes causantes de tal estela de desarrollo. Cuando digo "tener visión" me refiero a que se tomaron en serio el progreso de la ciudad y dejaron de pensar que a Bello había que tratarlo como el patio trasero del Valle del Aburrá. Antes habían dejado que este terruño fuera la cloaca de este "valle de lagrimas", parecía que nuestra tierra sólo era apta para albergar manicomios, cárceles y rellenos sanitarios. La historia ahora es distinta, en nuestro territorio está el centro comercial más rentable del Área Metropolitana, el POT (Plan de Ordenamiento Territorial) dio vía libre a la construcción en altura, Amazonía es el conjunto residencial con record en ventas y en la actualidad la Alcaldía libra un litigio jurídico con EPM por los dineros que tuvo que pagar la empresa de servicios por el terreno donde será construido la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales, entre otras construcciones y hechos de desarrollo que evidencian el cambio.   

Yo he vivido en Bello toda la vida y soy testigo de que jamás se tuvo la malla vial de ahora, ni que decir de la señalización de las calles o la reconstrucción de más de 20 instituciones educativas. Si uno camina por la ciudad con conciencia debe aceptar que ya no somos la cloaca, somos la puerta del desarrollo del Valle de Aburrá. Todas esas acciones que cambiaron a Bello valorizaron el hecho de vivir aquí, por tal motivo los que huyeron de la violencia y el estancamiento han vuelto a habitar esas nuevas casas o apartamentos que se construyen por toda la ciudad.

En el 2011 el precio de la tierra en Bello subió el 16,4%. De un momento a otro los bellanitas nos convertimos en la segunda ciudad más valorizada de Antioquia. Las casas quietas "ganaron" más de lo que sus dueños estimaron, hoy algunos viven en ellas, otros las alquilan, otros tienen varias (hasta edificios), otros las venden, todo el mundo ganó.

Después de tanto desarrollo no pueden pretender nuestros coterraneos seguir pagando al Estado por su tierra lo que pagaban hace diez años. Hoy los bellanitas pagan los mismos impuestos que cuando nadie creía en la ciudad, cuando vender una casa en Bello era una lucha infructuosa, cuando eramos la cloaca. Valga decir que, a mi juicio, el proceso de actualización catastral ha sido mal sensibilizado por la Administración Municipal, razón por la cual la ciudadanía se siente atacada. Pero si sensibilizar a la gente es decirle con "amor" que el desarrollo lo tenemos que seguir pagando entre todos por que todos ganamos, entonces hay que hacerlo.

Si usted vendió su casa en el último año sabrá que le desembolsaron un valor que corresponde a las cifras expuestas aquí, pero acepte que le pagó a la ciudad el mismo predial que le pagaba hace diez años. Bello no es ni de Óscar Suárez, ni Olga Suárez, ni Carlos Muñoz, Bello es suyo, así que como a las cosas suyas le tiene que "doler". 

Aunque la sensibilización no haya sido la correcta y los canales de comunicación hayan sido insuficientes, sensibilicese con el desarrollo de Bello, gana usted y ganamos todos.  

De colofón

1. No trabajo, ni trabajaré para esta administración, así que no asuma que es un favor que le hago al alcalde o a los Suárez, yo trabajo por Bello y, como me duele, pago lo justo. 

2. Es posible que por no ser asesorado o sensibilizado se sienta "robado" o engañado. 

3. Sea consciente de que no es una decisión amañada de la Alcaldía, es ajustada a la Ley 14 de 1983.

4. ¿No le parece que después de tanto desarrollo es la hora de meterse la mano al dril?.

5. No haga pensar a los que les duele la ciudad que a Bello no le gusta valorizarse.